domingo, 28 de junio de 2009

Matisse

MANUEL VICENT 28/06/2009

Las mujeres de Matisse dan la sensación de que se lo están pasando siempre muy bien. El pintor las imaginaba dormidas o recostadas en un diván, desperezándose voluptuosamente, en un interior cargado de colores calientes con el mar en la ventana. La exposición de Matisse en el Thyssen incluye su etapa de Niza, de 1917 a 1941, el periodo de entreguerras en que Europa quedó bajo los escombros y se preparaba para otra gran hecatombe. En esa misma época Picasso tuvo una tentación grecolatina con mujeres redondas casi marmóreas, pero pronto dejó a un lado la serenidad y comenzó a destrozarles el rostro como si el pincel fuera una garra de acero que después del violento zarpazo las dejara la mandíbula en la frente y un ojo en el cogote.

La distinta forma de adentrarse plásticamente en la figura de la mujer era otra vertiente de la rivalidad personal que se estableció por primera vez entre los dos artistas en el estudio de Gertrude Stein en París. Cuando Picasso llegó allí en 1905 descubrió que el salón de esta coleccionista judía lo presidía un cuadro de Matisse de gran formato, titulado La alegría de vivir, donde unas mujeres desnudas se refocilaban de placer en una escena campestre. Picasso no cesó de conspirar contra ese cuadro hasta conseguir que madame Stein se deshiciera de él y colgara en su lugar Las señoritas de Avignon, que son las pupilas de un prostíbulo de Barcelona. En el rostro de una de esas prostitutas comenzó el cubismo mediante un hachazo con que Picasso le partió la cara después de haber observado el ídolo africano que le mostró Matisse. Estos dos artistas abrieron el compás de siglo XX. Picasso fue el dueño de las formas destructivas. Matisse se apropió del color sensual y lo ofreció entero a sus mujeres para reconstruirlas. Las habitaciones que dan al mar en la costa de Niza se hallan tamizadas por visillos inflados por la brisa. El frutero de la mesa expande un aroma que se une al que despiden los muebles y la veta salobre que llega del mar. Los colores carnales del aire se concentran en el cuerpo de las mujeres. Matisse las amaba. En cambio, puede que Picasso enloqueciera al contemplar este amor y decidiera romperlo dejando entrar al Minotauro para que las violara a todas con sus ciegas embestidas.

viernes, 19 de junio de 2009

¿Creación o inmolación?

Vicente Verdú 19/6/2009

En el libro que vengo leyendo, Confesiones de un burgués, de Sándor Márai, vuelve el asunto de experimentar dolor, ser desdichado o infeliz para convertirse en un verdadero creador. La idea de que la Creación por antonomasia es obra de un Dios que llega hasta el lacerante sacrificio de su Hijo para alcanzar la salvación humana, ha trufado también la creencia de que no se puede ser artista siendo feliz ni sin dolerte algo. Sándor Márai lo dice del mismo modo que todos aprendimos esta sentencia en nuestra juventud de escritores: "Si fueras feliz, ¿qué necesidad tendrías de escribir?" Escribir, componer música, pintar, lograr la gran obra de arte echa sus raíces en una desventura u otra. Unos escritores o músicos fueron tuberculosos, otros morían intoxicados por el alcohol, casi todos padecían los desgarros de alguna profunda herida psíquica, tan incurable como altamente productiva. El dolor brindaba importantes réditos mientras el placer arruinaba. De ese modo, se decía de la historia de algunos hombres que aquélla mujer a la que amó apasionadamente le llevó a la ruina. La mujer y el deleite constituían un grave peligro para la creación. Por el contrario, el malestar procuraba inspiración, la desesperación daba alas. ¿Puede seguir sosteniéndose algo así? Los creativos de la publicidad han sido los primeros ejemplos de una época donde el buen humor ayuda a triunfar y el bienestar del alma, en general, ayuda a conocer y comunicarse mejor. ¿Un cambio de época? No cabe duda. Un cambio de época que significa un cambio de valores y, en consecuencia, otra consideración de lo malo y lo mejor. El artista doliente hacía espectáculo de su interesante experiencia sacrificial, "divinizada". Pero hacer hoy cultivo y exposición del dolor ni seduce a los demás ni mucho menos se espera que el artista, hallándose en penosas condiciones, pueda rendir apropiadamente. A la idea religiosa de la creación a través de casi morir corporalmente en el intento, sucede la idea deportiva de la creación a partir de conseguir las mayores prestaciones en su proyecto.

martes, 9 de junio de 2009

Las trampas de la fe

FERNANDO SAVATER 09/06/2009

¿Son compatibles la ciencia y la religión? ¿Es compatible la poesía amorosa y la ginecología? La respuesta es la misma: claro que sí, mientras cada una no pretenda enmendarle la plana a la otra. No es prudente acometer una cesárea tras documentarse en Juan Ramón Jiménez o Rilke, ni recordarle a quien cree que un beso apasionado lleva al éxtasis que después de todo se trata de un simple intercambio de microbios por vía oral. Las leyendas y mitos religiosos nos ayudan a buscar un significado simbólico al mundo y a la vida, mientras que la ciencia nos aclara su funcionamiento natural. Por mucho que conozcamos el mecanismo de los hechos, siempre nos queda la pregunta por su sentido para nosotros, que va más allá. Cuando Camoens llama al mar "inexplicable" no se refiere sólo al ritmo de las mareas...

Lo malo es que ciertos clérigos se empeñan en corregir los datos científicos con dogmas y tradiciones piadosas. El creacionismo no se conforma con ser un mito del origen, más o menos respetable como tantos otros, sino que intenta disfrazarse de ciencia como "diseño inteligente" para colarse en las escuelas americanas -que excluyen con buen criterio la enseñanza de doctrinas religiosas- y hasta en las universidades españolas, a poco que nos descuidemos. Ya se escuchan truenos episcopales contra la asignatura de Ciencias del mundo contemporáneo y no sólo contra Educación para la Ciudadanía. Denuncian que se pretenda imponer una "concepción del mundo", como si el conocimiento científico no surgiese de la observación experimental de la realidad sino del capricho político. Con el pretexto de que la ciencia no resuelve todos los enigmas de la naturaleza, aconsejan recurrir a la religión aunque no resuelva ninguno. Trampas de la fe, que también se dan en otros campos: como el capitalismo tiene muchos defectos, apliquemos el comunismo que sólo tiene defectos, etcétera.

Los que quieran conocer la opinión de un creyente ilustrado que no confunde religión y ciencia, pueden leer La voluntad de creer, el clásico de William James que acaba de editar Marbot. Debo advertirles, empero, que la obra desazona por igual a fieles e infieles desde finales del siglo XIX... A quienes por otra parte se nieguen a aceptar que la verdad es una construcción política o cultural, lo que iguala a Darwin con Rouco Varela, les aconsejo El miedo al conocimiento, de Paul Boghossian (Alianza), donde aprenderán a distinguirla del capricho epistémico o teológico.

El laicismo es imprescindible para la democracia, entre otras cosas, porque los políticos no entienden ya la parte sublime de los símbolos religiosos. Aludiendo a la vieja fórmula de juramento de los lehendakaris ("Ante Dios humillado...") a la que con buen juicio renunció Patxi López, proclama muy ufano ZP: "¡Patxi, eres lehendakari sin humillarte ante nadie!". Pero yo diría que el "humillado" no se refiere a quien asume el cargo -que bastantes inquietudes tiene ya- sino al Cristo que le mira desde el degradante tormento de la cruz. Un detalle tan solo aunque, si acierto, cambia un poco la cosa... En cuanto a la política teológica, basta recordar la escalofriante leyenda que campea según Dante sobre la puerta del infierno: "Son la primera sabiduría y el primer amor quienes me crearon". De esa proclama monoteísta nacieron todos los totalitarismos.

domingo, 7 de junio de 2009

¿Votar?

Vicente Verdú 5/6/2009

Si la opinión que tienen los europeos de los políticos (sondeo de mayo de 2009) es la de considerarlos el grupo social más corrupto ¿cómo escandalizarse que en las elecciones europeas de unos días después no acuda ni la mitad a votar? ¿Votar al corrupto, apoyar su previsible corrupción?

Votar, votar, votar a todo trance, dice la moral democrática, directamente vertida de la religión esquinada en el siglo de las Luces. Pero la religión, bajo otro aspecto, vuelve al mundo del poder. El voto es sagrado, el comicio es la comunión, la urna nuestra voluntad ciudadana, la papeleta nuestra legitimación individual.

Toda esta secuencia, heredada de los tiempos en que se debatía entre democracia y absolutismo, entre salvación y muerte, entre progreso y esclavitud, hace tiempo que funciona como un artefacto mostrenco.

La creciente mala calidad de los políticos se corresponde con la mala calidad de la democracia que ellos manipulan y deterioran. A la mala calidad de esos políticos no puede ofrecérseles nuestra cándida adhesión. Ni tampoco a la baja calidad de la democracia se le debe el culto a toda costa. Votar sin rechistar, votar religiosamente, es igual a aceptar ofuscadamente un sistema que ya ha demostrado de sobra su anacronismo, su ineficacia y su mofa de la población. Votar como se votaba en el siglo XIX cuando la mayor parte de la población era analfabeta y casi todos siervos coincidía con un progresivo ejercicio de afirmación de los derechos del nuevo ciudadano. Hoy, alfabetizados todos, liberados de oscurantismos, capaces de crítica y con más que justificadas aspiraciones a algo mejor, (auténtico y no simulado, eficaz y no ritual) votar y votar, sin más, es apoyar la reiteración del crimen, contribuir a la perdurabilidad de la justicia injusta, el abuso municipal, la demagogia electoralista, la incuria, la crónica endogamia de los equipos políticos que sin sorpresa volverán a mentir y a defraudar. Votar ¿otra vez a esta caterva?

¿No votar sería incumplir un deber ciudadano? ¿Cómo no advertir que ahora, cuando depositamos otra vez la papeleta (con tanta mansedumbre con tanta candidez, con tanta inercia irresponsable) volvemos a dar nuestro respaldo a esta degradada especie política, el grupo considerado popularmente, "electoralmente", como el más corrupto de la organización social?

La cosa Berlusconi

JOSÉ SARAMAGO 06/06/2009

No veo qué otro nombre le podría dar. Una cosa peligrosamente parecida a un ser humano, una cosa que da fiestas, organiza orgías y manda en un país llamado Italia. Esta cosa, esta enfermedad, este virus amenaza con ser la causa de la muerte moral del país de Verdi si un vómito profundo no consigue arrancarlo de la conciencia de los italianos antes de que el veneno acabe corroyéndole las venas y destrozando el corazón de una de las más ricas culturas europeas. Los valores básicos de la convivencia humana son pisoteados todos los días por las patas viscosas de la cosa Berlusconi que, entre sus múltiples talentos, tiene una habilidad funambulesca para abusar de las palabras, pervirtiéndoles la intención y el sentido, como en el caso del Polo de la Libertad, que así se llama el partido con que asaltó el poder. Le llamé delincuente a esta cosa y no me arrepiento. Por razones de naturaleza semántica y social que otros podrán explicar mejor que yo, el término delincuente tiene en Italia una carga negativa mucho más fuerte que en cualquier otro idioma hablado en Europa. Para traducir de forma clara y contundente lo que pienso de la cosa Berlusconi utilizo el término en la acepción que la lengua de Dante le viene dando habitualmente, aunque sea más que dudoso que Dante lo haya usado alguna vez. Delincuencia, en mi portugués, significa, de acuerdo con los diccionarios y la práctica corriente de la comunicación, "acto de cometer delitos, desobedecer leyes o padrones morales". La definición asienta en la cosa Berlusconi sin una arruga, sin una tirantez, hasta el punto de parecerse más a una segunda piel que la ropa que se pone encima. Desde hace años la cosa Berlusconi viene cometiendo delitos de variable aunque siempre demostrada gravedad. Para colmo, no es que desobedezca leyes sino, peor todavía, las manda fabricar para salvaguarda de sus intereses públicos y privados, de político, empresario y acompañante de menores, y en cuanto a los patrones morales, ni merece la pena hablar, no hay quien no sepa en Italia y en el mundo que la cosa Berlusconi hace mucho tiempo que cayó en la más completa abyección. Este es el primer ministro italiano, esta es la cosa que el pueblo italiano dos veces ha elegido para que le sirva de modelo, este es el camino de la ruina al que, por arrastramiento, están siendo llevados los valores de libertad y dignidad que impregnaron la música de Verdi y la acción política de Garibaldi, esos que hicieron de la Italia del siglo XIX, durante la lucha por la unificación, una guía espiritual de Europa y de los europeos. Es esto lo que la cosa Berlusconi quiere lanzar al cubo de la basura de la Historia. ¿Lo acabarán permitiendo los italianos?

viernes, 5 de junio de 2009

El encéfalo

JUAN JOSÉ MILLÁS 05/06/2009

Qué dilema, Dios, el del contribuyente. O va a las urnas y da por buena una campaña que ha competido en zafiedad, incultura y mal gusto con los programas más tirados de la tele, o no va y permite que cada uno lea su abstención como le convenga. También puede ir y votar en blanco, pero tiene uno la impresión de que ese voto es una respuesta floja, inane, a la agresión intelectual de que hemos sido víctimas durante las dos últimas semanas. Se dice pronto: 15 días con sus telediarios, con sus mítines, con sus horas de radio, con sus cuñas publicitarias, con sus decenas de titulares periodísticos, de editoriales, de tertulias, sin que en medio de toda esa palabrería (que ha costado una pasta) apareciera una sola idea. De haberla visto, habríamos corrido tras ella para atraparla o para que nos atrapara. El pensamiento es una conquista dura, una escalada. Y nada garantiza, por alto que hayas llegado, que no puedas precipitarte de nuevo en la barbarie. Que un país con la historia de Italia vote a Berlusconi debería hacernos reflexionar. El mal está ahí, a la vuelta de la esquina. Y se puede caer más bajo todavía, no hay límites en el descenso a los infiernos, en la decadencia política, en el declive cultural.

Pues ya decimos, ni una idea en toda la campaña, ni un pensamiento organizado, nada. Unos por vocación, otros por torpeza, todos se han aplicado a la tarea de evitar la creación de un escenario donde fuera posible el trabajo del encéfalo. Da pánico asomarse al campo de batalla. Yo votaré, claro, pero al borde del desaliento, quizá por cobardía, por aquello del mal menor, pero también porque en la abstención percibo a veces cierta suficiencia, cierto sentimiento de superioridad que no comparto. Ahora bien, al día siguiente de las elecciones habría que hacer algo, porque esta mierda no puede continuar así.

martes, 2 de junio de 2009

Oxfam Internacional alerta sobre los riesgos humanitarios en Gaza

La ONG señala en un informe hecho público hoy que los 1,5 millones de palestinos de la franja corren el riesgo de sumirse aún más en la pobreza

AGENCIAS - Madrid - 02/06/2009

La ONG Oxfam Internacional (Intermón Oxfam en España) ha advertido hoy de que los 1,5 millones de palestinos que viven en Gaza corren el riesgo de sumirse aún más en la pobreza y de depender de la ayuda exterior, dos años después de que Israel iniciara el bloqueo a la franja. En un informe titulado "La reconstrución de Gaza: las personas antes de la política" y hecho público en el segundo aniversario del comienzo del bloqueo, la ONG reclama a Israel que levante esta medida para permitir la reconstrucción de la zona.

Oxfam recuerda que unas 8.000 viviendas fueron destruidas en Gaza debido a la última incursión militar israelí e indica que las familias afectadas carecen de perspectiva para residir en nuevos hogares porque Israel impide la entrada de materiales de construcción. Ayer expertos de la ONU llegaron a la franja para investigar las violaciones a los derechos humanos durante la ofensiva israelí de comienzos de año, que causó unos 1.400 palestinos muertos, la mayoría civiles.

Oxfam recalca que entre febrero y abril de este año Israel ha reducido la variedad de suministros que entran en la franja, hasta el punto de que la ayuda alimentaria se limita a siete alimentos básicos. Israel también ha denegado en este tiempo la entrada de dinero en efectivo, así como la circulación de personas, ya que sólo una minoría de la población (pacientes críticos y algunos estudiantes) puede entrar y salir de la franja.

Por otro lado, Gaza necesita de artículos de emergencia para reconstruir el alcantarillado, instalaciones eléctricas e infraestructura agrícola, suministros también negados por Israel.

Recomendaciones

Oxfam insta a Israel a que permita el tránsito durante todos los días por el paso de Karni (el de mayor capacidad) y por el de Nahal Oz (que canaliza el combusible para la central eléctrica de Gaza). El informe también recomienda a Israel que cese las incursiones militares en Gaza y que permita el acceso sin restricciones a todos los bienes y personas, especialmente a quienes buscan tratamientos médicos no disponibles en la franja.

Además, Oxfam pide a los palestinos que no lancen cohetes sobre Israel y dejen de interferir en el control de la asistencia humanitaria internacional.

Por último, subraya que la comunidad internacional debe garantizar el fin del bloqueo, a través del Consejo de Seguridad de la ONU, y que la UE debe suspender su ayuda a Israel hasta que este país no levante las restricciones a Gaza.

Una política 'comparable al colonialismo'

La política que lleva a cabo Israel en los Territorios Ocupados palestinos tiene "características propias del colonialismo" y encaja con la definición internacional de apartheid, contemplado como los "actos inhumanos perpetrados con el propósito de establecer y mantener el dominio de un grupo racial sobre cualquier otro grupo racial y su sistemática opresión", según revela un informe de la organización gubernamental sudafricana Consejo de Investiación de Ciencias Humanas (HSRC, por sus siglas en inglés), en el que participaron expertos cisjordanos e israelíes.

El texto, de 300 páginas, es el resultado del trabajo de un equipo de profesores universitarios y profesionales del Derecho Internacional de Sudáfrica, Reino Unido, Israel y Cisjordania. El documento lleva por título '¿Ocupación, colonialismo, apartheid? Una reevaluación de las prácticas de Israel en los territorios palestinos ocupados en función del Derecho Internacional' y será presentado oficialmente en una conferencia convocada por el HSRC para los días 13 y 14 de junio en Ciudad del Cabo.

Israel se ha apropiado de tierra y agua en los Territorios Ocupados, ha fusionado la economía palestina con la israelí y ha impuesto un sistema de dominación sobre los palestinos para garantizar su sometimiento a estas medidas, concluye la investigación. "Estas medidas son una negación del derecho de autodeterminación de la población originaria y es un indicio de una clara vocación de asumir la soberanía de parte de sus tierras y recursos naturales. Este tipo de anexionismo territorial es una característica del colonialismo", concluye.

Los tres pilares del apartheid -división racial y mayores derechos para los blancos, segregación por áreas geográficas y leyes "draconianas" de seguridad para reprimir cualquier oposición al régimen mediante detenciones, torturas, censuras y asesinatos- se cumplen en los Territorios Ocupados, según el estudio.

El primer pilar se refleja en las leyes y políticas israelíes que establecen la identidad judía y su estatus legal superior, así como beneficios materiales para los judíos a los que no pueden acceder los no judíos. El segundo se aplica en la "política israelí de fragmentación de los Territorios Ocupados para confinar a los palestinos a reservas mientras. Los judíos israelíes tienen prohibida la entrada en esas reservas, pero pueden circular libremente por el resto del territorio palestino", explica. El tercer pilar se traduce en la "continua invocación de la seguridad por parte de Israel para legitimar restricciones a la libertad de opinión, expresión, reunión, asociación y movimiento de los palestinos que enmascara un intento de suprimir la disidencia a su sistema de dominación y mantener así el control sobre los palestinos como grupo".